Fuente : EFE
A la segunda va la vencida para Miguel Ángel Moratinos, de 67 años, exministro de Asuntos Exteriores. A partir de enero encabezará, un órgano de Naciones Unidas, aunque de rango menor. Se instalará en Nueva York y será el alto representante de la Alianza de Civilizaciones, según indican fuentes diplomáticas. Su nombramiento por Antonio Guterres, secretario general de Naciones Unidas, se hará público este otoño con motivo de la asamblea general de la organización. Moratinos debía de haber desempeñado el cargo desde marzo pasado, pero el diplomático catarí Nassir Abdulaziz al Nasser, que ejerce actualmente como alto representante, pidió una prórroga hasta fin de año por razones personales.
Moratinos se movió con destreza para conseguir el cargo, pero también contó con el apoyo del Gobierno de Mariano Rajoy y de Jorge Moragas, su embajador ante Naciones Unidas. El Partido Popular denostó al principio la Alianza de Civilizaciones, una iniciativa tomada por José Luis Rodríguez Zapatero nada más llegar al Gobierno en 2004, pero cuando accedió al poder en 2011 mantuvo su participación. Redujo su aportación, pero en noviembre de 2017 hizo aún una contribución de 200.000 euros.
Rodríguez Zapatero y Recep Tayip Erdogan, entonces primer ministro de Turquía, la pusieron en marcha hace 13 años con el objetivo de “fomentar el diálogo y la cooperación entre diferentes comunidades, culturas y civilizaciones y construir puentes que unan a los pueblos y personas”, según explica en su web el Ministerio de Asuntos Exteriores. En realidad, estaba sobre todo pensada para estrechar lazos con el mundo islámico y por eso obtuvo una generosa financiación catarí.
El exjefe de la diplomacia española ha expresado su intención de revitalizar esa alianza, algo aletargada y carente de medios. En su entorno, algunos le sugieren que intente trasladar su sede de Nueva York a Ginebra, porque desde unos Estados Unidos presididos por Donald Trump no es fácil fomentar el diálogo con determinados sectores de la sociedad civil de países musulmanes.
Su segundo intento en la ONU
Este es el segundo intento de Moratinos por encabezar un órgano de Naciones Unidas. Tras dejar de ser ministro, en octubre de 2010, presentó su candidatura al cargo de director general de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), pero perdió en 2011 por tan solo cuatro votos frente al brasileño José Graziano de Silva.
Pese a la derrota, le debió de coger gusto a la seguridad alimentaria porque fue contratado por una agencia de Qatar (QNFSP), que se dedica a tratar de garantizarla y luchar contra la desertificación. Trabajó un año desde Doha, hasta que a finales de 2013 las autoridades del emirato lograron patrocinar la firma de un convenio internacional sobre las consecuencias del cambio climático en la agricultura y la ganadería.
La estrecha relación que trabó con los responsables cataríes le ha valido después su apoyo para su nombramiento al frente de la Alianza de Civilizaciones. También ha contado con el respaldo de Marruecos, que le considera un gran amigo del reino. Ese aprecio quedó de nuevo demostrado este lunes, cuando fue invitado por Mohamed VI a la Fiesta del Trono, y después el monarca le recibió en audiencia junto con Rodríguez Zapatero.
Desde 2014 hasta ahora, Moratinos ha estado dedicado a la docencia, en el Instituto de Estudios Políticos de París, y, sobre todo, a labores de consultoría —con tal propósito, fundó la empresa ICP Consulting—, sobre todo con países emergentes.
Así mismo Preside la Fundación ONUART. Que en los últimos meses ha organizado diversos eventos y conciertos en Ginebra , Lúxor y Túnez , potenciando la Ruta de la Seda.